domingo, 29 de noviembre de 2009

Nadie podrá con nosotros

Después de este título para el post me he puesto el listón muy alto y si sigo adelante lo único que puedo hacer es estropearlo. Encima me encuentro a medio gas después de haber hecho doblete invernal. Bueno, me la voy a jugar.

La del sábado noche no fue una fiesta cualquiera. Fue una de las buenas. Todos los días pueden ser grandes días, pero no todos los días se reúne a los más grandes. Te sueles dar cuenta de eso cuando te despiertas al día siguiente, que es hoy, y lo primero que recuerdas es la última copa del penúltimo bar.

Enseguida te acuerdas de aquel comentario sobre los restaurantes chinos, asiáticos para más señas. Y de las risas sobre las bajas incentivadas de algunos de los grandes. Y del Franvi y del Teka. Y de los flashes cruzados. Y de Pedrito e Iniesta. Y de los ingenieros de hoy que dirigen el mundo a pesar de los litros de ayer.

Y, sobre todo, de lo bien que estabas cuando estabas allí. Por eso voy a guardar algo de esta noche especial en el blog y me pegaré un voltio por aquí cuando necesite un rato de respiración asistida. Te aconsejo hagas lo mismo.

Un abrazo a tos y hasta la próxima.




























viernes, 27 de noviembre de 2009

Otro de los nuestros

Quiero dedicar este brindis a toda la gente que nos ha seguido desde el principio, ¿vale? Ninoninoninoni……

La historia comienza más o menos así: Hoy por la mañana seguramente tú harás como siempre. Desayunarás un café y un pitillo. Uno detrás de otro. Quizá cuando leas esto ya te habrás enfundado la camisa de manga larga de color azul clarito, unos chinos -o los bluyins levi’s 501 etiqueta roja-, y los náuticos de invierno. En verano harías igual. Sigues sin concebir que pueda haber ropa de verano y de invierno, ¿verdad?

Pero es que hoy la música suena algo diferente. El protocolo manda que estrenes un buen traje de segunda mano. Porque es 27 de noviembre y el calendario apunta que hay que seguir cumpliendo.

Y es distinto a los demás días porque yo me encuentro con muchos recuerdos y un permiso especial para contarlos, pero como no quiero parecer en público todo lo blando que soy, ni tampoco pienso hacerme el valiente, me remito a aquella mítica frase de Pulp Fiction. Ya sabes.

Escribo esto con el único motivo de arrancarte una sonrisa y brindar desde el blog por los 40 sin IVA de otro de los nuestros. ¡Cáspita, Vive Dios, Goder!, pero si a mí lo que me apetecería es celebrarlo en plan botellón……¡ay! me temo que haya que seguir manteniendo las apariencias algún tiempo más. ¿Otros 40 años?

Tú ya conoces la mitad del cuento de la vida, y en esa frontera hay cosas que empiezan a quemar. Ojalá los problemas del laboro te dejen aspirar profundamente esta calada de buena amistad que te mando.

En este día, yo, que soy en gran parte el resultado de lo vivido contigo, incluso recuerdo el día que empezaron a gustarte las tías. Fue un poco después que a mí, claro. Acababa de ocurrir el accidente radiactivo de Chernóbil, aunque entonces no imaginábamos que su onda expansiva nos permitiría desplegar durante años parte del humor negro que tanto nos gusta. Si las paredes hablaran…..

Son muchas las experiencias que nos han unido y, a veces, cuando miro por el retrovisor y me da por viajar en sueños al pasado, me suelo encontrar contigo. Allí sentado. Esperándome con una gesto amable y un medio en la mano. Sin prisa. Sacando para afuera algo bueno de ti. Contagiando risas.

En aquella época no nos sobraba la pasta. Tampoco nos faltaban las copas o el ingenio para conseguirlas utilizando nuestras mejores sandeces. Y sobrar, lo que se dice sobrar, pocas veces nos sobraron. Me refiero a las copas. Bueno, habrá opiniones.

Lo más diabólico es que en este momento tengo bastante más clara la primera vez que nos juntó la vida que la última. Debe ser porque hace tiempo que no asaltas mi güiscola. O será porque, a veces, para ver la realidad hay que cerrar bien fuerte los ojos.

Lo digo porque mientras tu vida profesional transcurre como debe, merecidamente exitosa, mientras te afanas en resolver ecuaciones de segundo grado, mientras multiplicas polinomios y trazas curvas paramétricas, con más fuerza recuerdo yo a la persona que domina el arte de hacer amigos e influir positivamente en la gente. Y no hay truco, porque nunca he visto reclamo comercial en ti, ni traicionar al tan noble camarada que llevas dentro.

Contigo hemos descubierto que las amistades eternas colorean cualquier instante y se sobreponen incluso a la polilla de la vida cotidiana, y que cuestan lo que valen cuando uno busca consuelo y no encuentra dioses a los que recurrir.

Amigos como tú os deseo, y a ti, gran Sepe, te mando un par de abrazos para llevar, de esos que sólo te devuelve la vida sin pagar……y te espero para cerrar el siguiente pub, donde el tiempo no pasa nunca y siempre suena la voz del Vega tarareando El sitio de mi recreo, y donde la camarera sólo sabe servir medios copazos de la suerte. De la buena.

Venga.

Punto y seguido: Yo también prefiero las copas de un año, pero sólo si son a escote.

sábado, 21 de noviembre de 2009

20-N: ‘Españoles, Pepín se ha ido’

Fieles al momento histórico de cada año, el esqueleto de la 9/97 se reunió en primera convocatoria poco antes de las 22 horas del pasado viernes.

El primer punto del desorden del día incluía algunos temas espinosos y estrictamente confidenciales. Se debatieron en la barra-coloquio tras el apretón y besamanos de rigor. Hicimos nuestro trabajo aparentando degustar una beck’s en el Roxy 63. Es cierto que no es un lugar de culto; ni siquiera aparece en el circuito de las grandes gestas de antaño, pero un IECA nunca deja las diversas sin cuadrar y éramos conscientes que allí estábamos a salvo de las garras del SITEL.

Con alguna aparente excusa también mantuvimos al margen a los Fernández, obligados a desempeñar en esta ocasión tareas de segundo orden. Y también cumplieron, tan callando, casi ausentes, como esa feliz pareja que descuenta los días para que sea oficial la rebaja en el impuesto de matriculación de su flamante nuevo utilitario, a tan solo dos números del Príncipe de Vergara donde se cocía el ser o no ser de algo.

Ahora no lo recuerdo, pero se mataron algunas moscas a cañonazos y se llegó a una conclusión importante. Y fue gracias al buen criterio de los dos pilares en los que se asienta la supervisión del futuro, Lombardero & Gasco, que ofrecieron puntos de vista de calado sobre la fuga del año.

Una vez transcurridos los 15 minutos de cortesía diplomática con la que siempre se espera a las novias, nos dirigimos a Doña Paca, un local de restauración para celebraciones familiares o comidas de negocio; elegante y bien puesto. Fue nuestro destino siguiendo una tenaz recomendación de Lombardero. A primera vista la media ‘on site’ era elevada. De la mediana y la moda no hablo porque ya no tengo claros los conceptos.

Y pasó lo que tenía que pasar. Que todo es mentira. La Lombardero negó que la Paca fuera el local de su vida. La Castillo negó que ya hubiera consumido graciablemente todos sus puntos degetés. El Carri negó que fuera un contable chupatintas. La Patri negó las artes deportivas de Candela y hasta los pantalones de campana. El Gasco negó los diez doceavos del gimnasio de Boadilla. Y yo; pues yo negué las playas de Huelva. Pero lo mío es distinto, lo mío no tiene arreglo y a veces confundo el azúcar y la sal.

Para los amantes de la estadística, si es que hay alguno, el ticket medio rondó los 50 euros, sin tasa de basura. Cayeron del cielo cuatro copas de balón, una de ellas rematada con light, otra con el nuevo caminante Johnny orientando sus pasos hacia la derecha, y dos santos griales. Se consumaron algunas promesas incumplidas, alguna negación de la evidencia, y al pedir la cuenta echamos de menos a la acabada Ripoll y a la ejemplar madre florero Belén.

Y sin tiempo para entonar cánticos regionales ni juramentos al clero y a la corona, la noche acabó con algunas fotos con las cabezas cortadas por el gran angular, que pasarán a engordar nuestro álbum de los buenos momentos.

¿Y del Penta? Ni escuchar. Ha empezado la tregua. Hasta poco.

martes, 10 de noviembre de 2009

Gracias



Esta vez voy a hablar callándome. Dejaré que siga retumbando la frase de Maradona.
Buenas noches y felices sueños a todos.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

11º desencuentro de exs

Yo solo tenía que hacer lo que había que hacer.

Sólo tenía que dejarme llevar y conducir sin frenos hasta la cima al que fue, no hace tanto, el grupo de moda.

Sólo tenía que asegurarme que nuestros ídolos no están todos muertos, y sobre todo, sobre todo, debía asegurarme que intentaríamos llegar a la hora de la verdad con el reloj puesto en hora.

Y lo tuvimos cerca. Tan cerca que valió la pena. Fue fácil, lo confieso. Bastó con ponerme un par de vasos anchos en los ojos para descifrar lo que la noche no te deja ver. El resto fue coser y cantar.

Es verdad que el día siguiente fue duro. Y el otro. Y el otro. Pero hay que sobrevivir a la escena del crimen.

Confieso que no me enteré si quedó alguna cuenta pendiente; me sorprendería ingratamente que no fuera así. Volveremos a saldarla.

Lo que sí recuerdo nítidamente es que no me pusieron mi canción favorita en toda la noche, y me volví a casa esperando noches más duras que habrán de venir. Me piré a casa sin contar las baldosas al andar.

Y con la inspiración reciente del Daiquiri blues, del talento más delirante y apoteósico que pisa el firmamento musical español, os dedico estas letras a vosotros, a la peña presente y a la peña ausente.

Punto y coma. Punto y aparte. Y viceversa.
Nos has godido.